viernes, 26 de abril de 2013

LA IDIOTIZACION DE LAS MASAS

El Sistema de Dominación actúa como las manos de un artista que busca dar forma a una masa amorfa, ya sea en arcilla o yeso; donde sus dedos se entrecruzan para que se transformen en la obra maestra que desea lograr.

La masa es el pueblo, que necesariamente se lo debe idiotizar para que sea homogéneamente sumiso al Régimen, que lo manipula de acuerdo a las aspiraciones mas conspicuas del Poder Internacional del Dinero.

El Régimen, ya sea liberal capitalista o marxista leninista, tiene la máxima de idiotizar para conquistar. Como diría Lenin a los faltos de Fe: “la religión es el opio de los pueblos”, en clara alusión al cristianismo ortodoxo que los zares representaban. Sin religión, la idiotizacion es más acelerada.

El comunismo pérfido y ateo, idiotizaba por las buenas o por las malas. En cambio el liberalismo idiotiza de las maneras mas variadas sin necesidad del uso de la fuerza como lo hacia el comunismo. Por ejemplo, el consumismo actual es una forma de idiotizar. El dinero se ha convertido hoy en el opio que el pueblo necesita. Para que el dinero exista se necesita el consumo. El Sistema te induce a consumir aunque no lo desees, para que el dinero fluya como la sangre del cuerpo humano. Para consumir, las imágenes son las armas apropiadas del Régimen. Estas son cada vez mas vividas para impactar en el subconsciente del hombre, es por ello que la técnica apunta a la perfección de los equipos visuales, como los lcd, las salas de cine en 3d, y hasta los mismos celulares cada vez mas sofisticados; con todos ellos se libera una fuerza sicológica que es retenida en el cerebro humano, induciéndolo a tener lo que tiene el otro. Se dispara el celo, la envidia, la falsa felicidad que da el materialismo.

Las sociedades modernas son enriquecidas ficticiamente, para ser empobrecidas en su alma y espíritu. El hombre humilde no le sirve al Sistema por que aspira a la riqueza de la Fe, pero solo ellos encontraran el Reino de los Cielos, dice Nuestro Señor Jesucristo. En cambio el Sistema que responde al anticristo, busca enriquecer al hombre para volverlo soberbio, desenfrenado, y lo mas importante, necio y corrompido.
Vivimos en un mundo que busca idiotizarnos con falsos paradigmas, con mentiras que se disfrazan como verdades. La búsqueda de la verdad es peligrosa, contra-sistemica, por que la sabiduría solo se logra con la humildad y rectitud de corazón.

Las masas populares actúan por reacción, es decir por acción de un disparador. Al estar idiotizadas por los medios de comunicación, por ejemplo en lo que se refiere a la política del actual gobierno de Cristina Fernandez, o respecto de las bondades “elogiables” de la asociación de madres y abuelas de plaza de mayo en su lucha permanente por el falso paradigma de los derechos humanos; cualquier revisionismo periodístico que atente contra la imagen de mujer abnegada y luchadora que pretenden dar a la sociedad, es suficiente para la reacción espuria y hasta violenta de las masas. Incluso se puede tolerar gravísimos actos de corrupción de dichos referentes, como el resonante caso de las valijas con dólares venezolanos para financiar la campaña eleccionaria de Cristina, o el patético y desenfrenado enriquecimiento ilícito del parricida Sergio Schocklender con los planes de viviendas gratuitas “Sueños compartidos”.

Las masas idiotizadas toleran y hasta descreen por que ya forman parte de la corrupción del Sistema. Los idiotas aceptan la mentira por que creen tener la sabiduría para discernir lo que es bueno y lo que es malo. El Sistema a logrado “liberarlos” (y en ello se funda el liberalismo) de su apego a lo metafísico, que es Dios, para apegarse a la contracultura apatrida y comunizante.

Con la globalización no existen barreras culturales, ni fronteras que se puedan franquear; por lo que la idiotizacion de las masas, la estandarizacion, están aseguradas. Solo el nacionalismo, que es el peor enemigo de la globalización, puede defender los patrimonios territoriales, culturales e históricos.

Por ello todo aquel que pretenda proteger su religión, su lengua, su cultura, sus raíces, en definitiva las soberanía de su nación, será considerado un enemigo de la diversidad democrática.

Para el Sistema, Dios y Patria son políticamente incorrectos.

                                                                                            Enrique Marañon (h)

Publicado en revista "Milo" Nº 4, octubre del 2011